Cambios...

Toda mi vida ha estado dando de vueltas en estos últimos meses, me corrieron de la escuela de enfermería por rebelde y con eso me tumbaron la carrera que me faltaba un año para terminar y pues un mes después de esto mi papá falleció... y así toda la vida que yo conocía se fue al caño.

Los últimos días me he sentido muerta, sin ganas, sin nada, ¿se han sentido así? Rotos y vacíos por dentro, como sin alma.

Sin alma, dos palabras que implican el estado de ánimo más cabrón que he experimentado en la vida. Tengo miedo, me siento indefensa, perdida entre toda la mierda que me aventaron pero ¿saben? Hoy acabo de entender algo muy fuerte: SIGO VIVA.

Que me sienta muerta es diferente, pero ESTOY VIVA, no mamen, en una parte del camino olvidé que eso es lo más importante del cuento.

Hace unos días me miré al espejo y bueno, no me reconocí, hice un recuento de mi vida y pues tampoco me reconocí, así que creo que debo comenzar por ahí, por el hecho de aceptar esta nueva versión de mí, esta nueva Fanny, esta yo que ahora debe salir adelante.

Comencemos por que tengo 22 años y estoy en el primer semestre de enfermería en una de las mejores universidades del estado, hablaría del por qué me corrieron de la escuela patito pero ¿ya para qué? Ya pasó. También podría decir que cuando tenía 18 pensaba que a los 22 ya habría terminado la carrera y sería una mujer exitosa y pues bueno, en ese entonces también decía que era heterosexual y que a los 23 quería tener un bebé ¡JAJAJAJAJAJA! Así de curioso mi caso, pero recuerdo que también dije que a los 22 habría encontrado al amor de mi vida y ¿adivinen qué? En eso no me equivoqué. 

De entre todos los desajustes que he pasado, la causalidad (nueva palabra que me enseñó mi nueva mejor amiga Ale) más brillante de todas fue unir mi vida a la de Ariadna. Ella ha sido la amiga que necesitaba en estos momentos, la confidente, la médico que me cura heridas que nadie más ve, la cómplice en mis locuras, la animadora, la perversa, mi novia. Y la amo.

Me hubiera gustado hacer un listado de esas personas que estuvieron conmigo en todo esto y decirles que fueron un chingo y que no me daba abasto con todos los amigos que me visitaron en el funeral pero no, a los 22 ya entendí quienes son mis amigos y quienes son sólo caritas y un número más en FB o un contacto al que jamás llamaré y jamás me llamará en el cel, ese golpe también estuvo fuerte pero ¿necesito en mi vida gente que no me necesita en la suya? NO.

Así que del párrafo anterior concluimos que tengo dos amigas que vinieron sin ser llamadas y que me demostraron que aunque no las vea y no hablemos y no nada, siempre estarán ahí para mí: Xchell y Marisol. 

También tengo amigos en la distancia, esos que han estado pendientes de mí, que me leen, que me empujan poquito: Ozve. Pato, mi amado muy amado Manuel (wey, te amo más que a ningún otro hombre en el mundo y te agradezco tu interés, tu apoyo), Alevosia (gracias por dejarme contarte toda mi historia y animarme a seguirle) Sac mi hermana duranguense te amo mil millones y agradezco que sigas. Karenina, te quiero un chingo y a ti te haré un post aparte porque te lo debo y porque te lo mereces. Y una señora que no quiero catalogar ni etiquetar ni nada porque siempre se cocina aparte, usted Blu, usted sabe, ambas sabemos, así sin titulos, que le agradezco infinitamente su voto de confianza.

Esos de arriba son a los que no voy a soltar, esos de arriba son a los que no dejaré ir, ustedes, los demás que lean esto, sepan que cuentan conmigo en lo que necesiten y que a lo mejor un día les digo en la cara que esperaba un poco más, que los necesité ahí y que me fallaron, pero ni ustedes son adivinos ni yo anduve publicando que me quedé sin papá así que igual un día, de cuates en un café, les perdono lo que hicieron y volvemos a vivir en armonía con el cosmos.

Y también debo mencionar a mi familia, a mis primos, a mis tíos, a todos ellos, disculpen que yo sea un poquito ermitaña y extraña y a veces no me acoplé a la dinámica familiar, pero sepan que los amo, y que lo que han hecho por mi madre es algo que jamás voy a olvidar y les estaré eternamente agradecida por ello. Ustedes son apoyo y luz en la oscuridad.

Estos días me he enfocado en ver todo derrumbado, la vida como la conocía acabada, pero hoy entendí que mi perspectiva está errada, las cosas no se derrumbaron porque fuera el final sino porque ES EL COMIENZO.

El inicio de una nueva vida, ¿cuántos tienen la oportunidad de recomenzar? ¿Cuántos pueden decir que el plan se vino abajo (pero de verdad se vino abajo) y tuvieron que empezar de nuevo? ¿Cuántos tienen el valor de hacerlo y cuántos se han quedado a como quería quedarme yo, acostada en la cama y sin volver a salir a enfrentar el mundo?

Las casas con cimientos débiles se caen, hoy estoy construyendo otra vez, con más fuerza, con una nueva oportunidad ¿que no tengo carrera? La termino en cuatro años más, total, ni quería jubilarme joven y para ser jefa de enfermeras la edad no importa tanto. ¿Que no tengo dinero? Tengo dos manitas para trabajar vendiendo panecitos o haciendo alguna monada de esas que sé hacer. ¿Que no tengo papá? Tengo el recuerdo de la familia que disfruté y que amé, y el recuerdo de un señor que me quiso como si de verdad hubiera sido suya y que me solapó y al final, me regaló un libro, un libro que no he podido leer porque pues aún no lo supero. Y tengo una mamá que va a estar conmigo y yo con ella, ahí a jalones, con enojos, con lo que sea, somos un equipo.

Así es mi vida ahora, y con este ejercicio, con este escrito, acepto sus nuevas condiciones, sus nuevas reglas y de una vez voy poniendo las mías, no dejarme caer, seguir, vivir.

Y a lo mejor todo lo que me pasa es por pendeja pero, soy una pendeja decidida a no rendirse y eso señores, es algo que muchos de ustedes quisieran ser. ^^

Por su atención gracias.